
Las personas pueden olvidar lo que les dijiste, las personas pueden olvidar lo que les hiciste, pero nunca olvidarán como las hiciste sentir








o amistades, tu debes necesitarlas también. Yo también formaré parte de tu corazón, para estar siempre cerca cuando me necesites. No estaré ahí en carne, pero siempre estaré ahí en espíritu. Soportaré tus cambios de ánimo, y trataré de entender tus necesidades. Cuando estés enojada, reiré contigo cuando tú lo hagas. Cuando tu tristeza te sobrepase, lloraremos juntas. Si te sientes caída, yo te levantare y echaré tus dudas lejos, cuando pienses que no puedes continuar, yo te recordaré que si puedes. Cuando te desanimes, yo levantaré tu ego bien alto. Cuando necesites silencio pero no soledad, nos sentaremos juntas en paz y silencio. Cuando desees jugar, siempre tendrás una compañera de juegos. Cuando te sientas arriba del mundo, yo te abrazaré suavemente la espalda, y te diré qe tienes todo el derecho de estar ahí. Nunca estarás completamente sola, un pedazo mío siempre estará contigo. Una cosa siempre te podré brindar, el regalo de mi amistad. para que tú lo aceptes. Permite que nuestra amistad te haga sonreir, que brinde alegrias a tu vida, como tú lo has hecho conmigo. Cuando te sientas confundida, y pierdas tu camino, permíteme guiarte en el sendero correcto. Reposa sobre mí cuando necesites compañía. Déjame compartir tu tristeza y tu dolor.

Hay miradas que sin dudas dicen más que mil palabras y que al verlas todas juntas son como espejos del alma. Hay miradas que cuando miran son hirientes y lastiman; en cambio hay otras tan serenas que consuelan y acarician. Hay miradas insistentes, misteriosas, recurrentes y las hay indiferentes, como las de tanta gente. Hay miradas que ocultan verdades que mucho dañan.Y las hay que en la diaria lucha fortalecen y acompañan. Hay miradas que perdidas entre miles de miradas andan solas por la vida en busca de otras miradas. Y hay miradas que cautivan por lo bellas y profundas, como tu mirada azul qe me atrapa día a día. Hay miradas que por tristes enlutan a quien las viste. Y hay esas miradas dulces que ennobleces a quien las luce. Hay miradas que derriten hasta el corazón más duro e iluminan suavemente el pensamiento más oscuro.
